Resumen:
Los distintos procesos de una planta química tienen como objetivo aportar un valor añadido, ya sea mediante la obtención de nuevos productos a partir de diferentes materias primas o bien mediante la transformación, la variación de las características fisicoquímicas o la manipulación de un compuesto para, finalmente, llegar a un producto acabado. En todo este proceso, es necesario llevar a cabo una serie de pasos mediante el empleo de equipos que permiten realizar acciones concretas, a partir de las consignas del operario, cuya aplicación determinará el producto final. Todas esta acciones que se realizan en el proceso de producción industrial requiere un conjunto de operaciones en que la presencia del operador humano es constante, como es la puesta en marcha y el paro de procesos, la vigilancia de equipos, la manipulación de productos, la gestión de alarmas y el mantenimiento entre otras. Todo ha de llevarse a cabo con el menor coste posible, dentro de las mejores condiciones de seguridad humana y medioambiental. La automatización en el campo de la industria química se desarrolla en tres vertientes.En primer lugar sustituyendo al operador humano en aquellas tareas más repetitivas en las que no es necesaria su intervención o bien en las que es difícil la realización. En segundo lugar, mejorando la calidad del producto final y abaratando los costes del proceso. 10 Ahora en el campo de la industria de tintes o pinturas, para la obtención del producto final en forma industrial se usan insumos tales como pasta base y elementos adicionales, dependiendo del tipo de pintura a producirse. La pasta base se obtiene mezclando, dentro de un tanque, materias primas de forma secuencial y en cantidades preestablecidas. Las materias primas, como solventes y resinas, son bombeadas desde depósitos de almacenamiento y llevadas mediante tuberías hasta el tanque principal, esto implica que para garantizar la calidad del producto generado, debe existir precisión en la ejecución de los sub procesos involucrados.